Sumisión o comodidad
Que ha pasado con la más que nombrada mujer florero...
quizá se canso y decidió ser la flor única de su jardín.
Aquella que desde su jardín, le encantaría replantar el mundo de flores como ella,
para la que ningún obstáculo es imposible y que ve recompensado sus propios logros
en el camino.
Pero no todas rompieron su florero por un horizonte más amplio,
simplemente se resignaron a cambiar su nombre,
adornando su vida
Que nadie se confunda, que no es lo mismo una mujer sumisa
que una mujer cómoda. Aunque parezcan iguales no lo son.
Por desgracia la mujer sumisa sólo tiene voz cuando se encuentra sola,
sin ninguna sombra que ahogue su debilitado pensamiento.
Sin embargo la mujer cómoda que no acomodada,
es aquella que camina con soberbia, con un tono prepotente
y la que conoce todo desde los principios de la historia;
la mujer cómoda no pierde la voz, si no que se ha acostumbrado a ser la pesadumbre de los que la rodean y disfruta con ello reclamándolo como un derecho innato a su especie.
Si pusiéramos un sinónimo cruel a tal espécimen seguramente sería inane.
Comentarios
pd: NATALIA.....jeje